Hacer el Camino de Santiago, un viaje espiritual

Hacer el Camino de Santiago

Muchas personas eligen una manera diferente de pasar sus vacaciones. Ya sea por cultura, religión, motivación, o simplemente por hacer algo distinto optan por hacer el Camino de Santiago.

Si estás decidido a hacerlo, espero que este artículo te ayude a resolver dudas de todos los ámbitos. Todas las personas que terminan el Camino coinciden en que es una experiencia gratificante aunque dura, pero donde se encuentran a sí mismo y sienten una gran liberación.

Cosas que hay que tener claras antes de hacer el camino de Santiago

La credencial

Obligatoria para poder demostrar que estás haciendo el camino. Además los albergues suelen solicitarla para dejarte dormir en él. Se puede encontrar en albergues, oficinas de turismo y también en las iglesias.

Si quieres conseguirla antes de tiempo para ya ir preparado (es lo más recomendable) existe una asociación de amigos del camino donde pueden tenerlas. La credencial es personal e intransferible, en ella estarán tus datos y tus sellos del camino que ya llevas hecho.

La finalidad de estos sellos es dejar constancia de que efectivamente hemos pasado por ahí. Esto es importante, en primer lugar, para que en el albergue donde vamos a dormir vean que no estamos haciendo trampas y, en segundo lugar, para que nos den “La Compostela”, que es como un diploma que certifica que has completado el camino, para conseguirla debes acreditar haber recorrido más de 100 Kms del Camino.

Para conseguir “La Compostela”, se han de realizar los últimos 100 km a pie, caballo, y 200 km en bici. Y se entrega “La Compostela” a quien realiza un camino religioso, o con actitud de búsqueda.

Hacer el camino de Santiago ¿Qué camino tomar?

Es la gran duda junto con el que llevar en la mochila. Aquí os dejo alguna información relativa a los cinco caminos más populares o conocidos para que podáis escoger el camino que más de adecue a vuestra forma física o días disponibles para el recorrido.

Camino francés

Sin duda alguna es el recorrido con mayor popularidad y tránsito de peregrinos. Se compone de 37 etapas y unos 940 kms. Recorre la península de este a oeste y consta de la red de servicios, alojamientos y señalización más completa de todas.

Camino del Norte

También tiene gran popularidad como el camino francés pero suele estar menos masificado. Consta de 32 etapas y recorremos unos 815 kms. Desgraciadamente, la red de alojamientos peregrinos es escasa aunque está todo muy bien señalizado y puedes encontrar albergues durante todo el recorrido.

Camino Primitivo

Es un recorrido mucho más corto, aunque exigente, alrededor de unos 321 kms en 13 etapas. El primer peregrino fue Alfonso II. Afortunadamente, aunque el Camino francés es el elegido por la mayoría de los peregrinos, este camino no ha perdido popularidad.

Camino Inglés

7 etapas en 155 Kms. Es un camino muy poco masificado, y por tanto, escaso también en alojamientos y servicios pero muy bien señalizada.

Camino portugués

Se atraviesa Portugal de sur a norte y el rio Miño. El recorrido consta de 6 etapas y unos 115 Kms. Al igual que el Camino del Norte, el camino portugués escasea en alojamientos peregrinos y servicios.

Albergues

Hay que tener en cuenta que cualquier turismo de ocio o vacaciones que hayamos tenido en nuestra vida no tiene nada que ver con hacer el camino. Hay unas normas y horarios que hay que cumplir para el descanso de todos. Tienen una hora de cierre en torno a las 22 horas y también suelen tener un horario de salida.

Existen 3 tipos de albergues:
Municipales: Construidos con dinero público, normalmente piden una aportación económica mínima.

Privados: Sin ningún tipo de subvención. Suelen pedir un precio fijo de unos 10€. Suelen ser instalaciones muy cómodas.

Parroquiales: Construidos normalmente al lado de las iglesias con voluntarios que se encargan del acondicionamiento y limpieza. Suelen pedir un donativo.

Prácticamente todos los peregrinos se hacen esta pregunta. Hay que tener en cuenta que llevaras la mochila a cuestas durante todo el camino, así que evita los “por si” y cargarla más de la cuenta, ya que durante el camino te pasará factura. Muchas personas dicen que debe pesar como máximo el 10% del peso del peregrino. En mi opinión, cuanto menos peso, mejor

Que llevar en la mochila para el Camino de Santiago

• Mochila: ajustable tanto en espalda como en cintura para tener la mayor comodidad posible.
• Las botas: Obviamente, es un viaje a pie, así que hay que tener muy en cuenta el calzado que llevamos para el camino. Nunca utilicemos un calzado nuevo, las botas más recomendadas son las de trekking de caña alta para ajustar y proteger el tobillo.
• La ropa: Dos mudas y una para dormir son suficientes. Tampoco olvides un jersey ligero para los días que refresque un poco y un chubasquero para la lluvia.
• Saco de dormir o esterilla: En muchos albergues suele dormirse en el suelo, con lo cual te será de gran utilidad.
• Toalla pequeña de secado rápido son muy ligeras y muy útiles para que se seque a tiempo para emprender de nuevo el camino por la mañana.
• Papel higiénico: Un truco para que ocupe menos es quitarle el cartón circular de dentro.
• Neceser y pequeño botiquín: no te olvides del cortaúñas, aguja e hilo para tratar las ampollas, tiritas, agua oxigenada, compresas…
• Chanclas para la ducha: No solo descansaras los pies y los airearas después de una dura etapa, sino que evitaras los hongos.
• Visera o sombrero y crema protectora para evitar quemaduras además de las gafas de sol.
• Una cantimplora.
• Documentación: DNI, tarjeta sanitaria, tarjeta de crédito y el credencial del peregrino.
• Navaja: Imprescindible.
• Tapones para los oídos: Imprescindible para descansar por las noches, evitaras oír “bandas sonoras”.
• Bañador y brazalete reflectante.
• Teléfono móvil con cargador.
• Bolsas para congelados, es la mejor forma de tener la ropa organizada, en cada bolsa una prenda, así también se evita que se arruguen.

Espero que esta pequeña guía haya resuelto vuestras dudas. BUEN CAMINO

Gracias por seguir leyendo mis artículos y en especial éste de Hacer el Camino de Santiago también podéis leer Vacaciones en trenes nocturnos.